Este trastorno con las ayudas adecuadas, se soluciona en la inmensa mayoría de los casos de forma satisfactoria
Se trata de la incapacidad de las mujeres de realizar el acto sexual y de ser penetradas. Es un trastorno provocado por la contracción o espasmo involuntario de los músculos perineales del tercio externo de la vagina, en el momento que se intenta la penetración, provocando el cierre del introito vaginal e impidiendo o dificultando el acto sexual.
Es una enfermedad psicológica pero que se manifiesta con esa poderosa respuesta física.
Algunas mujeres que lo sufren pueden excitarse sexualmente y gozar un orgasmo, pero no son capaces de permitir la penetración.
Otras sin embargo tienen poco interés o deseo sexual y muchos temores y ansiedades sobre la penetración.
Las pacientes tratadas con nuestro método combinado, tienen un porcentaje de curación de más del 90%. Al mes del inicio del tratamiento logran tener relaciones sexuales con penetración vaginal sin dolor. En los meses siguientes logran una vida sexual normal.